martes, agosto 29, 2006

Letras de nuevo comienzo

La tarde que Cyn salió del hospital no pudo ver a Silvana por que los doctores no son nada flexibles en los horarios de visita, solo me han llamado a mi para sostener a la pequeña en la sala de rayos X, pues necesitan placas para observar su evolución, La pequeña a perdido peso, se le nota delgada, no llora cuando la sostengo de la forma que el médico necesita –levantándola por las axilas, sosteniéndole la cabeza con los dedos y la placa con los antebrazos- para hacer el estudio, me preocupo, sin embargo, los doctores se muestran muy optimistas con el estado de la bebe. La mantienen en observación, bajo tratamiento, en ayuno y alimentada vía intravenosa en la cama 40.
La tarde que Cyn por fin pudo entrar a ver a Silvana, lo hizo guiada por otra madre recién dada de alta que también estaba ahí para ver a su hijo, pequeño de siete meses y en incubadora. Ahí, en la sala de espera, veo a mi esposa alejándose acompañada por aquella otra mujer, muy jóvenes ambas, caminando lento debido a la operación demasiado reciente. Allá van ellas dos y mi corazón partiéndose por las noches de espera, pues la guardia en un hospital siempre es dura, más aún cuando se esta en un hospital infantil, vez mucho, niños con la mano o la pierna rota debido a sus travesuras o el descuido de los padres, niños enfermos de gravedad, otros casos que son solo sustos, algunas veces también se ven morir a los pequeños. No quieres enterarte de esto, pero no puedes irte, no sabes en que momento te llamaran por motivos de tu hija, así que no te vas a pesar de ves entrar y salir a fragmentos de familias preocupados por la salud de sus niños, los miras desde el fondo de la sala de espera, donde hace menos frío, o eso piensas, y te quedas afuera, esperando sin esperar, y de repente la puerta del consultorio se abre, y es el rostro grave de la madre que se prepara para quedarse a velar a su hijo, y es el rostro grave del padre que sabe debe guardar calma, es el llanto de la madre, apenas de pie, sosteniéndose en el umbral y llorando lo inevitable mientras el padre no puede creer que aquello este pasando, que pasó. Por todos ellos, por mi esposa que da vuelta en la esquina y se pierde en la laberíntica estructura del hospital, por Silvana, por esta incertidumbre envuelta en horas sin reportes, espero. Regreso al asiento –siempre te piden que tomes asiento- y guardo silencio mientras me pongo a vigilar el reloj y su marcha.
Cuando Cyn regreso, ya se había decidido Silvana entraría al quirófano al día siguiente, aún no sabían a que hora, pero ya era un hecho. Intervendrán a la pequeña por que no hay otra forma de ayudarle que la corrección por cirugía. A la mañana siguiente ni siquiera me dejan llegar a la sala de neonatos, pues la bebe esta en quirófano, solo entrego los pañales de aquel día y regreso a la sala de espera, pero me detengo, pienso en las promesas de los abuelos, pienso en mi particular falta de fe, y me siento imposibilitado para pedir. Los ojos se me nublan, aspiro un poco de aire, me siento en la silla mas cercana, y la entrego, entrego a mi hija a aquello que llaman destino, dios, padre, hermano, alma encallada, aciaga espera; que suceda entonces, confió en la fuerza de aquella que como mujer es más fuerte que yo, hombre, apenas hombre y muy cansado… ahora debo irme, regreso a la sala de espera a acompañar a mi mujer, a aquellos que nos acompañan hoy, a gastar estas horas en espera del cirujano y sus noticias.

Tras horas después nos mandan llamar, los médicos se ven tranquilos, eso me tranquiliza, nos dan algunos detalles de la cirugía y en resumen la nena esta bien, esta muy bien, recuperándose, pasarán varios días más antes de que pueda comer por si misma, pero ya solo falta eso, ya solo falta esa espera. No nos dejan ver a la pequeña, pues la hora de visitas terminó hace mucho, será mañana, mañana, mañana.

Mañana comienzarán los últimos días de esta larga espera…

4 comentarios:

Mirando y Pedaleando dijo...

En serio que casi suelto lágrimas, me da mucho gusto que tu beba ya esté bien, se ha terminado la frustración tan gachita que te mantenía despierto.

¡¡¡¡¡¡¡¡Un abrazo!!!!!!!!!! :D

Dark Light dijo...

Me da mucho gusto al igual q a pau q ya todo vaya pasando y q las cosas estén mejor!!!

Efe dijo...

Paulina, gracias, ya todo esta bien. Los desvelos ahora son otros, de naturaleza muy distinta, sucede que la pequeña trae el horario invertido, y no hay poder humano que la despierte de día, así como no hay poder humano que la duerma de noche, pero esta bien, muy bien.
La noche será el momento para conocernos.
Abrazo!!!!!!!!!!
Luz oscura, ahora todo marcha por el camino correcto. Ahora, lo que sigue son los próximos 17 años...
:)

Anónimo dijo...
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